Por: Paola Campbell (@paocampbell)
Por primera vez, una obra pública de carácter federal será sometida a consulta popular por parte de un Presidente electo de México.
Así sucederá con la construcción del Nuevo Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (NAICM), pues su futuro será decidido junto con los ciudadanos, tras la decisión de Andrés Manuel López Obrador.
El próximo Secretario de Comunicaciones y Transportes, Javier Jiménez Espriú, explicó que, tras llevarse a cabo un dictamen técnico del NAICM, se determinó que hay dos opciones para el futuro del proyecto:
1) Continuar con la construcción en Texcoco
2) Crear dos pistas en el Aeropuerto de Santa Lucía.
Al respecto, dijo que se realizará una “amplia consulta” pública, para decidir entre las dos opciones, y que ésta tendrá lugar a finales de octubre.
Tras sus palabras, el Presidente electo, Andrés Manuel López Obrador pidió a los mexicanos que ayuden al futuro Gobierno a tomar esa decisión.
“Que entre todos decidamos lo que resulte mejor para la nación, para el interés general. Es un tema, como lo han escuchado, complicado, difícil, por eso tenemos que resolverlo entre todos. Que se ponga por delante, como debe de ser, el interés general, no los intereses personales o de un grupo. Vamos a resolver esto”, expresó.
Las bases de la consulta se presentarán el próximo 8 de septiembre, para que ésta sea realizada a finales de octubre. El tabasqueño añadió que podría ser una consulta de manera directa, en la que se integraría una comisión y se instalarían mesas en las plazas públicas o una encuesta nacional vigilada por los ciudadanos.
Agregó que con el método democrático es como se va a tener el mejor resultado, y que la decisión no se limitará a un hombre o a un puñado de técnicos, sino que se pondrá en manos de todos los mexicanos.
Indicó también que, a partir de hoy, todos los mexicanos pueden acceder a los documentos complementarios, a través de este enlace.
Para razonar ambas opciones
Jiménez Espriú explicó que, según el dictamen técnico que se le presentó a López Obrador para el proyecto del NAIM, ambas opciones tienen puntos a favor y en contra, por lo que se decidió elaborar una consulta más amplia.
Los puntos a favor de continuar con el proyecto del NAIM serían:
- Su cercanía con la Ciudad de Méxic
- Un gran centro de operaciones internacionales
- Que el Gobierno ya posee ese terreno
- Que existe financiamiento para 75 por ciento de la inversión
- Que contará con mayor capacidad en el lejano plaz
- Que ya se cuenta con un avance del 32 por ciento
En contra de esta opción hay puntos como:
- El costo de la construcción cada vez mayor, pues de 2014 a la fecha incrementó de 169 mil millones de pesos a 300 mil millones de pesos
- El retraso de al menos cuatro años en la construcción
- Un mayor riesgo al inicio de las operaciones, pues el actual aeropuerto tendría que cerrar inmediatamente
Por su parte, la construcción de dos pistas en la base aérea de Santa Lucía tiene como puntos a favor que:
- Se conservarían ambos aeropuertos
- Habría un menor tiempo para el arranque de operaciones
- El costo del mantenimiento sería menor, así como el de inversión, pues ésta sería de 70 mil millones de pesos.
- Se fortalecería el sistema aeroportuario
En contra de esta opción hay puntos como que:
- En su dictamen, el MITRE indicó que la operación de dos aeropuertos no es viable, sin embargo, se requiere un estudio profundo que podría llevar cinco meses. Por su parte, los técnicos chilenos y mexicanos sostienen que sí es posible.
- Las operaciones separadas generarían mayores costos para aerolíneas y molestias a pasajeros.
- Los costos de cancelación de la obra actual impactarían al presupuesto, pues sería de 100 mil millones de pesos, 60 mil por las obras ya realizadas y 40 mil por la firma de contratos de las obras no realizadas.
El futuro Secretario explicó que, a partir del lunes, se entregará más información sobre las dos opciones, y también que la opinión de los ingenieros estará lista el 5 de septiembre. Por este motivo, el 8 de septiembre se presentarán las bases para la consulta.
Sobre el tema de la concesión, López Obrador dijo que no se descarta la posibilidad, pues en caso de que se decida continuar con el proyecto de Texcoco, será necesario conseguir recursos a través de ésta, ya sea en una parte o en su totalidad.
“Lo que no aceptamos es una camisa de fuerza. Es muy complejo el tema. Tenemos vocación democrática y no estamos sometidos a intereses cerrados, nada más reconozco lo que dice el pueblo”, dijo.