Denuncian a funcionario del SIAPA por muerte de perros que vivían en planta de tratamiento

Asociaciones civiles y trabajadores del Sistema Intermunicipal de Agua Potable y Alcantarillado (SIAPA) denunciaron públicamente al director técnico de la dependencia, Manuel Robledo Siordia, por el presunto sacrificio injustificado de cuatro perros que vivían en la planta de tratamiento en Río Blanco.

  • Los animales: Canelo, Velga, Chuki y Tóxica, habitaban en las instalaciones desde hacía más de cuatro años, según denunció la asociación

os trabajadores del SIAPA eran quienes se encargaban de su alimentación y cuidado, por lo que aseguran que los perros no generaban ningún costo para la institución y, por el contrario, cumplían una función importante, ya que desde su llegada se redujeron los robos nocturnos dentro del recinto.

Denuncian a funcionario del SIAPA por muerte de perros que vivían en planta de tratamiento

De acuerdo con los testimonios, el pasado 16 de junio, Manuel Robledo Siordia ordenó el retiro de los animales argumentando que no podían permanecer en la planta. Sin previo aviso y sin dar oportunidad de buscarles hogar, el 17 de junio se envió una perrera para recogerlos.

Para el 20 de junio, los cuatro perros ya habían sido sacrificados, pese a que —según las fuentes— ya existía una persona interesada en adoptarlos.

Colectivos de protección animal y empleados del organismo acusan al funcionario de haber actuado con negligencia e insensibilidad, violando leyes estatales que protegen a los animales.

Lamentaron que un servidor público “alimente la impunidad en casos de maltrato animal” en un estado donde estas prácticas continúan siendo una problemática grave.

El gobernador de Jalisco, Pablo Lemus, dijo a este medio que tomará el caso “de inmediato”.

Así lo reportaron en Facebook

SOS organizaciones, rescatistas y personas de corazón que ayudan a tantos animalitos! El viernes 20 de junio sacrificaron a el Canelo, la Velga, el Chuki y la Toxica, cuatro perritos que vivian en la planta de tratamiento de Río Blanco hace 5, 4 y 3 años adoptados por el personal del SIAPA.
Los perros cumplían el papel de guardianes ya que la planta sufría robos durante las noches, y con los perritos ya no se atrevían a meterse a la planta. Graciela, asistente de Antonio Juarez Trueba, el nuevo director general, dijo que ellos NO estaban enterados.
En Vigilancia, Juan José Mérida, dijo haber leído un docto que mencionaba algo de unos perros, pero que venía de la Dirección Técnica del SIAPA (ext 4301), cuyo director es el Ing. Manuel Robledo Siordia y en esa extensión contesta su asistente Cinthia.
El lunes 16 de junio, un WhatsApp enviado al personal de la planta, decía que los perros no debían estar ahi y al día siguiente, el martes 17 de junio, sin previo aviso llegó por ellos la perrera de Zapopan sin dar la oportunidad a los perritos de hallarles un hogar temporal.
La señora Martha, que es rescatista de la tercera edad y maestra federal, los iba adoptar y el lunes 23 de junio que se los llevaría, halló la novedad que a los perritos los mataron desde el viernes 20 porque la perrera sólo los guarda 72 horas y no 1 semana como informaron al personal de la planta, sin darles oportunidad de tener un hogar.
La crueldad animal se refiere a cualquier acto u omisión que cause daño dolor sufrimiento o muerte injustificada a un animal. EXIGIMOS una explicación pública al director general del SIAPA, Antonio Juárez Trueba por qué permitió que un subordinado como lo es el ing. Robledo, actuara de forma tan intempestiva y CRUEL y ordenara el asesinato de 4 perros que durante años sirvieron de vigilantes a la dependencia sin costarles un sólo cinco, ya que su alimentación y cuidado eran brindados por los empleados de la planta.
El Ing Robledo violó leyes y reglamentos que establecen la protección a los animales en el estado, y decidió dar un PÉSIMO ejemplo de crueldad a la sociedad matando impunemente a estos perritos que por años habitaron en esa planta.
Ya no nos regresarán al Canelo, la Velga, el Chuki ni a la Toxica por la prepotencia y las decisiones de un sujeto con cierta autoridad dentro del SIAPA, que desprecia la vida y se siente Dios o narco, para decidir quién vive y a quien mata, aunque se trate de seres inocentes sanos y bien atendidos, que cumplían fielmente con la función de vigilancia en la planta del SIAPA que desde hace una semana que se los llevaron, ya se metieron a robar.
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