Por: Redacción (@Reversomx)
07 de septiembre 2016.- El alcalde de Guadalajara, Enrique Alfaro, viajó el viernes pasado a Toluca en avión privado de la empresa Mota-Engil, una de las constructoras de la Línea 3 del Tren Ligero.
"Fue un 'ride' en el avión de los abogados de la empresa de la Línea 3 del Tren Eléctrico, Mota-Engil. Vinieron los abogados a la reunión con nosotros, trabajaron aquí para irnos a la reunión con el Secretario (de Comunicaciones y Transportes, Gerardo Ruiz Esparza) y nos ofrecieron 'ride' en la ida y yo me regresé en vuelo comercial", señaló Alfaro.
De acuerdo con una nota publicada por Juan Carlos Sagredo en el diario Mural, Alfaro viajó junto a Hugo Luna, jefe de Gabinete del Gobierno de Guadalajara, Ismael del Toro, coordinador de los diputados locales de Movimiento Ciudadano y los abogados de la empresa Mota-Engil para reunirse con el secretario de Comunicaciones y Transportes, Gerardo Ruiz Esparza, con la intención de ponerlo al tanto de las inundaciones en la colonia Alcalde Barranquitas y los retrasos en las obras de la Línea 3.
Aunque el artículo 61 de la Ley de Responsabilidades de los Servidores Públicos del Estado de Jalisco establece que los funcionarios no deben recibir dinero o dádivas de particulares, Enrique Alfaro indicó que no cometió ninguna irregularidad al viajar en el avión de la constructora.
"No tengo un solo contrato con ellos de nada, esa empresa no trabaja con el Ayuntamiento, es la empresa que está ejecutando la obra de la Línea 3 (...) simplemente ahorramos un pasaje".
El viaje a Cuba en jet privado
No es la primera vez que Enrique Alfaro está en el ojo del huracán por viajar en un jet privado. En abril de 2011, sin avisar al Ayuntamiento, el entonces alcalde de Tlajomulco realizó un viaje a Cuba con los ex consejeros electorales del Instituto Electoral y de Participación Ciudadana (IEPC) Tomás Figueroa y Víctor Hugo Bernal, para entrevistarse con el trovador Silvio Rodríguez con el fin de que diera un concierto en una colonia pobre de Tlajomulco. El jet privado fue prestado por Antonio Fonseca Vaca, socio de la empresa de software CGI Consulting.
El viaje de Alfaro a Cuba se convirtió en escándalo porque voló sin permiso del cabildo de Tlajomulco y provocó un conflicto de interés al ser acompañado por los dos consejeros del IEPC, puso en duda la imparcialidad de las autoridades electorales, pues su cercanía generó la desconfianza de que en 2012 la balanza se inclinara hacia él, al convertirse en uno de los aspirantes a la gubernatura.